Estamos instaurando unas nuevas rutinas y buenas costumbres en casa. Hasta ahora el rato de lectura lo había incluído dentro del día a día de "cole en casa" pero de un tiempo a esta parte estoy intentando verlo como un "todo" del que tanto se habla en pedagogía Waldorf.
Así que no hay fronteras o al menos no tan visibles entre el tiempo de "mami -maestra" y mamá. Damian ha acabado su primer libro largo, Peter Pan ( la versión de Disney ). Por las noches nos ponemos cómodos en el sofá y mientras que Nora se entrega a su inspiración nocturna ( dibujo, construcciones etc), leemos juntos.
Luego les leo como siempre el cuento de antes de ir a dormir.
Ahora como segundo libro ha elegido una álbum de cuento donde a un lobo le pasa de todo por querer comerse a un cerdito. Seguro que reímos un rato!
Lo que me gusta de este año escolar y del año pasado es que le voy dando las herramientas que necesita, el apoyo que necesita pero luego él va haciendo las conexiones y el trabajo necesario para llegar a este avance en lectura. No hay fichas de repeticiones aburridas ni libros de lecturas repetitivas y sin sentido que nos cansaban a todos.
Con Nora claro está hemos aprendido la "lección" y uso el mismo "método" si se puede llamar así y realmente veo que con las herramientas necesarias ellos SABEN.
Por estos ratitos vale la pena esperar todo el día!!
Sylvia. Qué curioso. Así aprende mi hija mayor. Sin fichas ni repetición, simplemente leyendo y la ayudo o me "ayuda", y así poco a poco avanza segura y para su madre toda carreras, avanza lento, pero cuando me siento y lo veo todo con calma, lleva un ritmo muy bueno y su avance es perfecto para su personita, je je je.
ResponderEliminarEnhorabuena.